¿El VIH tiene cura?
No existe una cura definitiva, por lo que el VIH se ha convertido en una enfermedad crónica. A pesar de no haber alcanzado la curación del VIH, con la atención médica adecuada y tratamiento el VIH se puede controlar y el paciente puede tener una calidad de vida similar al de las personas que no lo tienen.
Los medicamentos contra el VIH impiden que el virus se reproduzca (se replique), lo que reduce la carga viral. Al tener menos concentración del VIH en el organismo el sistema inmunitario tiene más posibilidad de recuperarse y aunque no se llega a eliminar del todo el virus del cuerpo, el sistema inmunitario está lo suficientemente fuerte como para combatir las infecciones y ciertos tipos de cáncer relacionados con el VIH. El tratamiento además reduce el riesgo de transmisión del VIH.
El hecho de tratar la enfermedad lo antes posible y la gran evolución que han experimentado los fármacos para el VIH, ha hecho que la esperanza de vida de estos pacientes sea cada vez mayor.
Por el contrario, las personas que no reciben tratamiento para el VIH permitirán que el virus se extienda por su cuerpo, debilitando gravemente el sistema inmunitario y pudiendo llegar al estadio sida. Además, la carga viral en sangre es elevada y pueden propagar el virus.